El Observatorio Universitario de la Violencia Institucional de la Facultad de Filosofía y Letras expresa su total repudio a la violencia represiva y criminal contra quienes participaban de una manifestación en el Obelisco, ejercida por la Policía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que causó la muerte de Facundo Molares. No cabe ninguna duda de que su muerte fue a manos de la policía. Estos hechos fueron atestiguados por las imágenes que muestran a los policías presionando violentamente contra el piso a Molares, a quien habían puesto boca abajo. Las imágenes fueron registradas por manifestantes que advertían desesperadamente que se estaba poniendo morado y no podía respirar, mientras reclamaban que llamaran a una ambulancia. Lo presionaron hasta la asfixia, como años atrás lo hizo la policía de Minnesota cuando mató a George Floyd.
Represión brutal, detención de manifestantes, asesinato de un militante, justificación de la violencia policial en boca de autoridades de la Ciudad y los medios de comunicación afines. Casi un remedo de titulares como “La crisis causó dos nuevas muertes” en junio de 2002 con los que el gobierno y los medios afines intentaron ocultar su responsabilidad en el asesinato de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki; el gobierno de la Ciudad y los medios afines atribuyen la muerte de “un manifestante” producto de “una descompensación” de alguien que tenía “factores de riesgo”, una justificación que suena a intento de atribuir responsabilidad al propio Molares de su muerte.
A tres días de las elecciones PASO, a pocos meses de cumplirse 40 años de la democracia conseguida tras la dictadura cívico-militar y el terrorismo de Estado, no es posible naturalizar la muerte, la mentira y la violencia extrema contra quienes se manifiestan políticamente.
Exigimos juicio y castigo a los responsables de este crimen de estado y el cese de los discursos estigmatizantes y violentos que permiten e impulsan los crímenes policiales sobre la población civil.
Observatorio Universitario de la Violencia Institucional
Autoridades de la Facultad de Filosofía y Letras
Imagen: Télam